Lo malo de morir de amor, es que no te mueres.

7:13:00 p.m.



Era como tener el sol en mis manos, sentía que a su lado todo podría ser diferente, pero lo que menos esperaba, era las malas influencias de esas personas que junto con él me destrozaron una parte de mi. 


Todos llegamos a ese punto dónde pensamos que la felicidad tal vez no sea para nosotros y vemos al mundo arder únicamente porque pasamos por momento bochornosos que nos hace perder la fe, no solo a las personas; sino a ese ser superior que dudamos de su existencia.

Quiero remontarme unos 8 meses atrás donde sentía que el mundo se me caía encima e incluso pasó por mi mente la palabra "suicidio" sentía que la vida ya no tenía sentido para mí, todos mis planes, esperanzas y felicidad se habían derrumbado con una cruel noticia que había recibido, más sin embargo con la fuerza de mi familia y unos cuantos amigos muy cercanos me fui recuperando poco a poco de aquella depresión que me tenía atrapado.

A los pocos meses, conocí a una persona que me hizo sentir nuevamente esa chispa que le faltaba a mi vida y empecé a retomar mis actividades diarias y todo empezó a regularizarse. Sentía que día a día mi felicidad se resumía en alguien y sabía que tal vez esto podría durar para toda una vida, pero algo muy dentro de mi, sentía que debía estar preparado para contarle los más oscuros secretos de mi pasado y que me pueda apoyar y sí así fue. Lastimosamente no me supo entender y se alejó de mí, no puedo decir que no me me sentí mal, porque sentía que el aprecio que le había tomado se esfumo en un instante cuando hasta sus amigos ya sabían cosas personales que en algún momento de mi vida fue muy doloroso para mí, pero al final ya no me importó, personas como aquellas son las que menos necesitamos en la vida y lo único que pudo pasar fue sacarla de la mente, el corazón y los sentimientos y fue muy sencillo de olvidar ese trago amargo.

Me sorprende a mi mismo que poco a poco me voy convirtiendo más fuerte de lo que era antes, con tantas cosas vividas  y tantas cosas para contar es muy difícil que a estas alturas de mi vida alguien sea capaz de herirme y ponerme a llorar por cosas sin importancia.

Lo que me preocupa ahora es únicamente y exclusivamente mi felicidad, ya no le doy mucha importancia del qué dirán porque al fin y al cabo las palabras se lo lleva el viente.

Además puedo decir que hace exactamente dos semanas recibí la mejor noticia del mundo, que fue motivo de celebración tanto para mi familia, mis amigos cercanos y para mí. Lo importante de todo esto es aprender a vivir y saber sobrellevar las situaciones más difíciles, con eso es muy difícil que alguien nos pueda herir porque ya estamos preparado para eso y muchas cosas más.


Con tecnología de Blogger.